Activos de una empresa: clasificación, características y ejemplos

25/10/2024

Los activos de una empresa son todo lo que genera un valor, desde algo tangible como una tablet hasta algo tan intangible como un CDT o una inversión digital. Entender qué son, cómo se clasifican, sus características y sus ejemplos de uso, mejoran la gestión administrativa y operativa de cualquier empresa.

¿Qué son los activos de una empresa?

Un activo es cualquier bien que posee una empresa y que tiene el potencial de generar ingresos o ser convertido en dinero. Los activos pueden ser tangibles o intangibles, y cada tipo aporta valor de diferentes maneras. En términos generales, un activo tangible puede ser un edificio o un vehículo, mientras que uno intangible puede ser una patente o una marca registrada.

Ejemplos de activos tangibles:

Ejemplos de activos intangibles:

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Importancia de los activos en una empresa

Los activos no solo representan valor para una empresa, sino que también juegan un papel clave en su operación diaria y en la toma de decisiones estratégicas. Conocer el valor de cada activo puede ayudar a los dueños de empresas a mejorar la rentabilidad, a tomar decisiones durante momentos de crisis o a vender activos no productivos para generar liquidez sin afectar las operaciones.

Dato curioso: en promedio, las grandes empresas tecnológicas valoran sus activos intangibles, como las patentes y el software, en más del 60% del valor total de sus activos.

Clasificación de los activos de una empresa

Los activos se dividen principalmente en activos corrientes y activos no corrientes, dependiendo de su liquidez y del tiempo que se espera para convertirlos en una ganancia.

Activos corrientes

Los activos corrientes son aquellos que pueden convertirse en efectivo en un plazo máximo de un año. Son fundamentales para mantener el flujo de caja necesario para cubrir los costos operativos como nómina, pagos a proveedores e impuestos. Los activos corrientes proporcionan liquidez inmediata y son esenciales para la operación diaria de cualquier empresa.

Ejemplos de activos corrientes son:

Activo Descripción
Efectivo Dinero en caja o en cuentas bancarias.
Cuentas por cobrar Dinero que los clientes deben a la empresa por ventas a crédito.
Inventarios Productos que la empresa tiene para la venta o producción.

Tip financiero: mantén un control detallado de tus cuentas por cobrar para evitar problemas de flujo de caja.

Activos no corrientes

Los activos no corrientes son aquellos que no se espera que generen beneficios en el corto plazo, sino que son inversiones a largo plazo. Estos activos tienden a aumentar su valor con el tiempo o a generar ingresos a largo plazo.

Ejemplos de activos no corrientes son:

Activo Descripción
Propiedades y terrenos Terrenos y edificios que posee la empresa. 🏢
Maquinaria Equipos utilizados en la producción. 🎥
Patentes y marcas Derechos de propiedad intelectual que generan beneficios. 📝

Diferencias entre activos tangibles e intangibles

Una empresa puede poseer tanto activos tangibles como intangibles. Los activos tangibles, como el nombre indica, son aquellos que tienen una forma física, mientras que los intangibles son recursos sin una presencia física, pero que pueden generar ingresos significativos.

Activos Tangibles Activos Intangibles
Son bienes físicos como edificios, maquinaria, etc. No tienen forma física, como software, patentes o marcas.
Tienen una vida útil limitada por desgaste físico. Pueden generar ingresos durante muchos años.
Ejemplo: un camión de reparto. Ejemplo: una licencia de software.

Características de los activos de una empresa

Los activos tienen diversas características que afectan su valor y su capacidad para generar ingresos.

Algunas de las características más importantes son:

Liquidez

La liquidez se refiere a la facilidad con la que un activo puede convertirse en dinero en efectivo. Cuanto más rápido se pueda vender o usar un activo para obtener efectivo, mayor es su liquidez. Por lo general, los activos corrientes, como el inventario, tienen alta liquidez, mientras que los activos no corrientes suelen tener una liquidez menor, aunque pueden generar mayores ingresos en el largo plazo.

Durabilidad

La durabilidad de un activo se refiere a su capacidad para mantener su valor o incluso aumentarlo con el tiempo. Por ejemplo, un terreno o una propiedad inmobiliaria tiende a valorizarse con los años, mientras que los equipos electrónicos o maquinaria pueden depreciarse más rápidamente.

Rentabilidad

La rentabilidad es la capacidad de un activo para generar ganancias. Algunos activos, como los productos en inventario, generan ingresos rápidamente al ser vendidos, mientras que otros, como los CDTs o las inversiones en bienes raíces, pueden generar ingresos a lo largo del tiempo.

Activos según el tipo de empresa

Cada tipo de empresa tiene diferentes necesidades de activos, según su sector y modelo de negocio.  Entre los más particulares se encuentran:

Activos en empresas manufactureras

En estas empresas se manejan activos como la maquinaria industrial que procesa materias primas, que vendrían a ser las máquinas de confección o de ensamble.

También son activos las materias primas que transforman y procesan y los edificios o instalaciones que usan.

Activos en empresas de servicios

Aquí se ven más los activos intangibles, como por ejemplo las bases de datos de un call center o las páginas web que se desarrollan en una agencia digital.

Activos en empresas de comercio

Cuando es una empresa de comercio de productos en stock, el activo más importante es su inventario, puesto que es el que genera las ganancias.

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¿Cómo gestionar los activos de una empresa eficientemente?

Una gestión de activos adecuada, puede hacer la diferencia entre mantener márgenes muy altos de ganancia o, por el contrario, contemplar pérdidas, para ello, es clave implementar estrategias que controlen el ciclo de vida de los activos, desde su adquisición hasta su depreciación o venta.

Estrategias de gestión de activos

Entre las estrategias más comunes tenemos:

Importancia de la valoración de activos

Cuando sabes el valor de un activo tienes información valiosa, que te permite tomar decisiones acertadas.

La relevancia de una correcta gestión de activos para el éxito empresarial

Conocer el valor real de un activo, permite entender su valor de negociación en momentos de venta o también entender su valor a futuro, con esta información clara se pueden establecer estrategias para la correcta gestión de los activos.

El conocimiento y la gestión eficiente de los activos te permite maximizar el valor de tu compañía, garantizar la sostenibilidad empresarial y prepararte para los retos del futuro.

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